Saltar al contenido

ALARMAS RESTAURANTE TASHKENT

  • por

Acabamos de llegar a la capital de Uzbekistán, antes de darnos un duchazo vamos a la oficina de correos y casi sin entrar en el hotel, desmontamos todo y preparamos las bicis para dejarlas en una tienda que las empaqueten para el avión. Es hora de comer y tenemos hambre, en la esquina de la calle del hotel hay un restaurante con cientos de mesas, trabajan a destajo y suena una alarma cada vez que un pedido está listo, no dejan de sonar, terminas acostumbrándote, pero trabajar ahí tiene que ser un sufrimiento.

Wordpress Social Share Plugin powered by Ultimatelysocial