88KM 515+
Probablemente ha sido de las mejores noches que hemos dormido. El cansancio ayuda, pero sentirnos en una casa también relaja. Antes de las 6:00 estamos despiertos y desde nuestro habitáculo que consiste una pared de madera a media altura, con dos camas de 90x180cm y una mesilla escuchamos los sonidos de la gente haciendo cosas. Nos vestimos y salimos a saludar, están preparando el desayuno. En nuestro caso una especie de talos de queso, verduras, huevos y galletas caseras. No dejamos nada y más vale que la etapa comienza bajando.
Nos despedimos de la familia haciéndonos una foto con ellos y de ese pueblo en el que sólo viven cuatro familias. Estamos a 1700 y en poco bajamos a 1400 y hacemos cuentas del subidón que es por este lado hasta el Zagari pass, 1200 en 14km, un puerto de tour hors categorie. Seguimos el curso del río por un valle de paredes rocosas verticales a un lado y de pino escalador al otro. Hasta que a los 8km ese río desemboca en otro y el valle se abre del todo. Ahora ya el perfil seguirá bajando toda la etapa con pequeños repechos, pero es favorable pedaleando. 75km donde nunca dejamos de ver ríos caudalosos, grises, montañas frondosas a ambos lados, nubes algodonosas en el cielo y pequeños pueblos esparcidos por todo.
En un momento dado cuando el perfil es más llano comenzamos a cruzar pueblitos con muretes de piedra y pasillos de árboles que hacen de túnel y donde hueles la leña de las casas. Gente humilde sentada en los bancos de las entradas de sus casas, conversando, fumando un cigarrillo y saludando a nuestro paso.
La etapa es muy rápida y los kilómetros pasan con trozos de carretera que desaparecen por la escorrentía de las laderas y que obligan a los vehículos a reducir la velocidad para pasar trozos de agujeros y piedras que bambolean las suspensiones. El río acumula troncos de árboles arrastrados y nos hace pensar que no hace mucho ha habido un temporal muy fuerte en todos los valles porque tienen todos el mismo aspecto de post catástrofe.
A los 50km casi sin esfuerzo paramos en Lentekhi, un pueblito coqueto con supermercado donde compramos algo de fruta y donde conocemos a una pareja alemana que viaja con su furgoneta. No tardan un segundo en presentarse e interesarse por nuestro viaje. Coincide que acabamos en el mismo camping así que postergamos la conversación a más tarde. Se marchan con su mercedes vario y nosotros seguimos primero a Tsageri donde comemos un sándwich de embutido y escapamos de los perros abandonados que se acercan como zoombies en busca de comida.
La carretera que nos llevará a Kutaisi en un día baja sin descanso y de los 2600msn de hace un día ya estamos en los 500msn, más de 2000 de desnivel si nos olvidamos algo en el alto. Quizá este lado sea más duro y más espectacular, pero no lo sabremos. Pronto tras un par de rectas con árboles encontramos un puente que cruza el río Tskhenistskali, de nombre impronunciable y que nos esboza un cuestón que nos hace temblar las piernas, pero en la primera curva hay una valla verde y unas banderas. Ahí hay un camping sencillo, acogedor donde la furgo de los alemanes ya está a la sombra de unos árboles. Nic, ella, nos dice directamente que nos invitan a cenar. Preparamos campamento y la idea es escribir y editar la etapa, pero ellos cenan pronto y la conversación es super interesante sobre los países que han viajado, las culturas, la política, y luego nos enseñan la furgo, pintamos el logo de yoslocuento afuera y se nos hace de noche para hacer tareas e ir a dormir.
Ruta en strava.
