
Hemos llegado a Sultán, un pueblito cerca de Bolu y desde el que subiremos al día siguiente a parque de Göksu a 1500msn. Unas chicas del pueblo nos dicen donde podemos acampar y aunque es zona de paso, estamos bastante tranquilos. En un momento dado, al otro lado del canal aparece una perra, la miramos, mueve el rabo y sabemos que pronto encontrará la manera de llegar a nosotros. Poco a poco se acerca hasta que ya con confianza se queda a nuestro lado, busca caricias y compañía. Nos vamos a dormir y ella se acuesta junto a la tienda de campaña. Con los ruidos de la noche nos despierta ladrándoles, pero no entiende castellano y nos molestará varias veces más. Al levantarnos ahí está, esperando caricias y cuando montamos las bicis, en sus ojos vemos tristeza, llega de nuevo la soledad.